La Asociación Americana de Psiquiatría (APA,
en sus siglas en inglés) ha modificado por primera vez en 20 años su
'Manual de diagnósticos y estadísticas de enfermedades mentales' para
incluir en él nuevos trastornos, tales como la adicción a la comida o
los berrinches persistentes en los niños.
Esta publicación es uno de los manuales de referencia más
influyentes para los psiquiatras y en su quinta edición, que será
publicada en mayo de 2013, incluirá un total de 20 capítulos que, según
la APA, estarán reestructurados basándose en una relación aparente entre
los síntomas de las enfermedades.
Entre los cambios más importantes que presentará está una nueva
definición de lo que ahora será llamado trastorno del espectro autista.
De este modo, ya no se hablará de autismo ni síndrome de Asperger,
trastorno generalizado del desarrollo o trastorno desintegrativo de la
infancia, sino que todos estos términos quedarán incluidos dentro del
diagnóstico de trastorno del espectro autista "para ayudar de forma más
precisa y consistente a diagnosticar a niños con autismo".
Otros cambios importantes en el nuevo manual es que ahora, por
primera vez, los psiquiatras reconocen la adicción a la comida como una
enfermedad mental real.
También se catalogará a partir de ahora como enfermedad mental el
acaparamiento compulsivo, definición que servirá para diagnosticar a
quienes tienen "una dificultad persistente de deshacerse o separarse de
posesiones, sin importar su valor real".
"La conducta a menudo tiene efectos perjudiciales, tanto
emocionales como físicos, sociales, financieros e incluso legales, para
el acaparador y los miembros de su familia", ha explicado a la BBC el
doctor Eduardo Grande, psiquiatra y ex presidente de la Asociación
Argentina de Salud Mental.
Y también se incluye el llamado Trastorno de Desregulación
Disruptiva del Estado de Ánimo (DMDD, en sus siglas en inglés) con el
cual se diagnosticará a niños que "exhiben episodios frecuentes de
irritabilidad y arrebatos de conducta durante tres o más veces a la
semana durante más de un año".
Esta definición ha causado amplia controversia porque, según
explica, podría desembocar en el diagnóstico y medicación de los
berrinches de los niños.
En cambio, la APA afirma que con este nuevo término se espera
combatir el potencial error de diagnosticar a los niños con trastorno
bipolar y tratarlos innecesariamente con potentes medicamentos.
Por otro lado, el manual ha introducido una categoría de
trastornos que "necesitan ser más investigados", para incluir en ellos
la adicción al juego 'on-line' o a través de Internet o las relaciones
sexuales.
Asimismo, también excluye la definición de duelo como trastorno
depresivo cuando éste dura menos de dos meses después de la muerte de un
ser querido.
Sobre este punto, incluye varias notas en las que reconoce que "el
duelo es un factor de estrés psicológico severo que puede precipitar un
episodio depresivo grave poco después de la muerte de un ser querido".
Y a pesar de que muchos habían pedido definir el "trastorno
hipersexual", o adicción al sexo, como una enfermedad mental, el manual
ha decidido excluirlo.
Pese a estos cambios, el profesor Grande reconoce que los
psiquiatras "no tienen que aferrarse al manual, porque pueden aparecer
otras sintomatologías que no se encuadren dentro de los diagnósticos que
éste recoge".
"Es necesario que, como profesionales, cada psiquiatra sea
consciente del paciente que trata y de saber si realmente se le puede
encuadrar la enfermedad a ese paciente y no seguir sólo lo que dice el
manual. Como lenguaje común es válido, pero creo que es una publicación
mucho más útil para el profesional que comienza que para el que ya está
formado", ha aseverado.